Una adolescente contó el calvario que vivió durante años, al ser violada por sus propios hermanos Una adolescente contó el calvario que vivió durante años, al ser violada por sus propios hermanos
Hoy ya con 21 años y a pesar del dolor que la invade por los recuerdos, una adolescente -residente en el interior del departamento Robles- dejó al descubierto el calvario que vivió por años, mientras era abusada sexualmente por sus hermanos.
También te puede interesar:
En diálogo exclusivo con Noticiero 7, la víctima manifestó que los ultrajes se llevaron a cabo cuando vivía en el paraje La Cuchilla, junto a todo su grupo familiar.
Además indicó que en medio de fuertes crisis intentó quitarse la vida en reiteradas oportunidades.
“Todo eso ocurrió en la casa de mis padres, allá en La Cuchilla”, contaba la joven y recordó que sus hermanos comenzaron a tocarla. “Ellos venían por la noche, uno cada noche, y me tocaban, yo no podía dormir”, expresó.
Según sostuvo la víctima, con el pasar del tiempo los ultrajes agravaban. “Primero me tocaban y después ya me accedían carnalmente. Ellos tenían un acuerdo de turnase uno cada noche. Siempre era de madrugada”.
“Yo no podía dormir. Todas las noches lloraba. Intenté suicidarme. Ya no quería vivir, no podía aguantar todo lo que me hacían”, expresó mientras refregaba sus manos, recordando todo su sufrimiento.
Entre lágrimas relató: “Yo les contaba a mis padres, pero ellos me pegaban. Me decían que diga la verdad, que con quién había estado yo. Ellos no me creían. Mi hermana mayor sabía, porque yo le conté y ella ya veía cómo me tocaban mis hermanos cuando estaba dormida. Nunca me creyeron, ellos me golpeaban mucho”.
Ante los vejámenes, la adolescente manifestó que se fue de su casa con un hombre con el que durante un tiempo fue su pareja y con el que tuvo un hijo, hoy un pequeño de solo dos años.
“Mi hijo está con el padre ahora, yo intenté suicidarme y me quitaron la tenencia y se la dieron a él”, relató sobre esta etapa de su vida. Y añadió: “Pero yo quiero estar con mi hijo, pero no tengo dónde vivir. Ahora estoy aquí con los pastores”, ya que fue cobijada en la Iglesia Evangélica.
“A ellos (padres) no los quiero ver. Les preguntaría ¿por qué no me han cuidado si siempre hice las cosas como me decían? resaltó y aseguró que hace mucho tiempo que no se hablan.
“Hoy tengo miedo también porque mi hermano le busca pelea a mi expareja y mi hijo está con él”, señaló. La adolescente expresó que recién dos días atrás decidió hacer la denuncia ante la Comisaría de Forres. Allí expresó que los acusados -quienes hoy tienen 22 y 23 años- luego de los manoseos, la accedieron carnalmente.