"Nicolle, autora y los restantes, partícipes" de defraudación, afirmó Callegaris

Un maratón de audiencias presenciales concluyó ayer con el requerimiento fiscal de prisión preventiva para la contadora Ivana Nicolle y para su esposo, Andrés Alejandro Morón; y por la prórroga de detención para el empresario cordobés, Carlos Sebastián Blati.

"Defraudación por administración" es la acusación enrostrada por la fiscal Eugenia Callegaris al matrimonio. "Partícipe de defraudación" es el cargo atribuido a Blati. Todos están sospechados de perpetrar una defraudación millonaria en perjuicio de la firma Enleocat.

La acusación de Callegaris

"Nicolle, autora y los otros dos restantes, partícipes", sintetizó Callegaris en audiencia, presidida por la jueza de Control y Garantías, Sara Harón.

Más de 20 minutos le llevó a la fiscal fundamentar su hipótesis de cómo se hizo el ilícito, la cual -señaló- funcionó para los tres imputados sentados al frente. Ofreció también diálogos y mensajes entre los protagonistas.

La batalla entre fiscalía, la querella y defensa tuvo dos aristas. Por un lado, el debate penal sobre la acusación. Y asimismo, un áspero enfrentamiento entre el querellante, Gabriel Coronel Chalfón con los defensores de Morón, Lucas Vieyra y Rodolfo Cuestas.

Los requerimientos

Por un lado, la defensa de Nicolle, a cargo de Juan José Saín, bregó por "la falta de mérito y excarcelación. Mi representada no hizo las transferencias. Carecía de orden de autoridad pública; no tenía mandato de la Ley; tampoco se trató de acto jurídico alguno", afirmó el letrado. "... Lo que tenemos aquí es un lavado de activos, una lisa compra de facturas, remitos e IVA", complementó.

A su turno, la defensa de Blati, a cargo de Gastón Merino y Martín Basbús, realizaron idéntico pedido, pero difirieron en la forma. "Solicitamos la libertad por falta de mérito en atención a que acompañamos los remitos de las operaciones sobre las que se cuestionan las transferencias. También, en consonancia, la excarcelación, atento a que han pasado ya 15 días desde su detención: se ha incorporado prueba, remitos, testimonios, etc. hasta el día de hoy no se pudo fundamentar la existencia de un solo riesgo procesal", subrayaron.

Luego, Vieyra, Cuestas y Soledad Sarmiento reclamaron la libertad de Morón por juzgar que no tiene responsabilidad alguna en las operatorias endilgadas por la Fiscalía. Pusieron especial énfasis en el tiempo transcurrido de su detención, a la que consideraron "ya vencida en todos los plazos legales".

Al mediodía, la magistrada anunció el cierre del debate. Lógicamente, y ante tantos planteos realizados en la audiencia, decidió diferir su resolución hasta martes o jueves de la semana entrante.

Eslabones anónimos, aún lejos de la Justicia

Los querellantes, Macarena Barrionuevo y Gabriel Coronel Chalfón se adhirieron al pedido fiscal, es decir a la doble prisión preventiva y pusieron especial énfasis "en los riesgos procesales latentes" y en qué faltan identificar "a otros participantes del hecho ideado por Morón…".

"Todas las evidencias incorporadas en la causa dejan en claro la "existencia de una organización clara, con una concreta distribución de roles liderada por Morón y su esposa Nicolle", ahondó Coronel Chalfón.

Coincidente con el criterio de Saín, Coronel Chalfón juzgó que aún hay personas que intervinieron en las operatorias en pugna, detalle que sin mencionarlo aludió a personas que residirían en la provincia de Córdoba.

Acusó a Blati de ser un nexo inocente, quizá ingenuo, "de los cerebros", pero al mismo tiempo destacó que el empresario "está ayudando" a desentrañar la trama de la maniobra millonaria.