Estuvieron presentes obispos de todo el NOA y sacerdotes de las diócesis de Santiago y Añatuya. Emotiva celebración ante un templo colmado de fieles, de quienes recibió muestras de afecto al final de la misa.
"Ayúdenme con su oración para ser digno de esta consigna", pidió monseñor Vicente Bokalic "Ayúdenme con su oración para ser digno de esta consigna", pidió monseñor Vicente Bokalic
Monseñor Vicente Bokalic, ofició su primera misa como cardenal de la Iglesia Católica en nuestra ciudad, oportunidad en la que pidió a los fieles y a sus hermanos obispos y curas que lo ayuden con la oración, "para ser digno de esta consigna" que le encomendó el papa Francisco.
Frente a un colmado templo, el arzobispo de la Arquidiócesis Primada de la Argentina, agradeció a los fieles por la manifestación de cariño y reconocimiento, y dijo que "el año 2024 quedará en la historia por tantos acontecimientos vividos", por la canonización de Mama Antula, la nominación de nuestra Iglesia como Primada de la Argentina, y su nombramiento como cardenal.
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Acompañaron a Bokalic, monseñor Luis Villalba, arzobispo Emérito de Tucumán y cardenal; monseñor Carlos Sánchez, arzobispo de Tucumán, Dante Braida, obispo de La Rioja; Luis Urbanc, obispo de Catamarca, José Díaz, obispo de Concepción, Tucumán; Darío Quintana, obispo prelado de la Prelatura de Cafayate; monseñor Luis Antonio Scozzina, obispo de Orán; monseñor Claudio Castricone, obispo auxiliar de Orán; monseñor José Luis Corral, obispo de Añatuya; Roberto Ferrari, obispo auxiliar de San Miguel de Tucumán; monseñor Enrique Martínez Ossola, obispo auxiliar de Santiago del Estero; monseñor Francisco Polti, obispo emérito de Santiago del Estero; monseñor César Daniel Fernández, obispo de Jujuy y el vicepresidente de la Conferencia Episcopal Argentina.
Al inicio de la celebración, el padre Raúl Llugdar y una miembro de la comunidad parroquial, dieron la bienvenida al flamante cardenal.
Durante su homilía, el cardenal Bokalic reflexionó sobre el sentido del evangelio del domingo, que narra la visita de María a su prima Isabel, al que alificó de "un encuentro que supera todo miedo", en virtud de las circunstancias en las que cada una había concebido un hijo.
Y se preguntó: ¿No será que nuestra querida Patria, con tantas heridas e historias sin cerrar, necesita de visitas que provoquen encuentro, que den lugar a la fraternidad, a la superación de enconos y de gravedades; enojos ancestrales que paralizan todo intento de una sociedad más justa, más integradora; donde podamos vivir con esperanza cierta?".
Este es un año que quedará en la historia
"El año 2024 quedará en la historia por tantos acontecimientos vividos. El inmenso regalo de la canonización de María Antonia de San José. Así comenzamos el año, con el reconocimiento a esta santa que no se cansó de caminar y salir a visitar, a pobres y ricos, buenos y malignos.
La segunda visita fue la nominación de nuestra Iglesia como Primada de la Argentina, otra sorpresa del papa Francisco, y lo último, el nombramiento de un cardenal para la iglesia universal con sede en Santiago del Estero quién lo hubiese imaginado… esa lógica no estaba ni en mi mente ni en mi espíritu. Ayúdenme con su oración para ser digno de esta consigna; sigamos caminando juntos, edificando una Iglesia de servicio permanente, samaritana, fraterna, donde tengan lugar todos y se sientan como en su casa".
