¡Atención papás! Qué hay detrás de las manchas negras en el cuello o axilas de los niños

Hay señales que el organismo emana con el transcurso de la niñez para advertir o dar alguna señal de alarma. Entre tantas manifestaciones, es posible que algunos padres hayan notado el llamado "acantosis nigricans": manchas de color marrón o negro, en el cuelo, axilas o detrás de las rodillas. Los especialistas sostienen que son signo de que algo está ocurriendo en el cuerpo, y aunque no son una enfermedad en sí misma, pueden ser un indicador importante de un problema subyacente.

El Dr. Ángel Muratore, médico pediatra, docente de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Santiago del Estero se refirió al tema y advirtió a los padres sobre estos signos y la importancia de la consulta precoz.

"Es muy frecuente, recibir en nuestros consultorios, niños de ambos sexos, generalmente de la segunda infancia o preadolescencia y con importante antecedente de sobrepeso y mal nutrición con este tipo de lesiones llamadas acantosis nigricans. Estas manchas de color marrón o negro son un signo de que algo está ocurriendo en el cuerpo, y aunque no son una enfermedad en sí misma, pueden ser un indicador importante de un problema subyacente", explica y advierte el profesional, en diálogo con EL LIBERAL.

 Las manchas son más frecuentes de lo que una persona piensa. Se trata de un cambio en la piel, que hace que algunas zonas se oscurezcan y se vuelvan más gruesas. Las áreas más comunes son el cuello, las axilas, la ingle y detrás de las rodillas. 

Aunque puede ser simplemente una cuestión estética, en muchos casos puede estar relacionada con niveles altos de insulina (resistencia a la insulina) o, en algunos casos, con enfermedades endocrinas o metabólicas.

"Los papás de los pequeños creen que son zonas sucias o con falta de higiene y quieren resolverlo cepillando la zona sin ningún éxito. La piel afectada, se puede engrosar. Generalmente se presenta cuando hay un aumento  en la concentración de insulina en sangre, lo que conocemos como insulinoresistencia. Los niños que presentan éstas lesiones tienen un riesgo mayor de padecer Diabetes tipo 2", detalla Muratore. 

Manchas: no poseen tratamiento específico

Según detalla el médico pediatra, Dr. Ángel Muratore, "estas manchas no poseen un tratamiento específico, pero mejora notablemente o desaparece al solucionar el estado nutricional del pequeño. También se lo ha relacionado con lesiones pre neoplásicas de órganos internos como estómago o hígado".

Asimismo considera que "también son frecuentes en personas con quistes en los ovarios, trastornos de glándulas tiroideas o suprarrenales".

Examen

Estas manchas son fácilmente detectables en una consulta al médico, sentencia el pediatra: "No se trata de un signo raro de encontrar al realizar el examen físico de un paciente en el consultorio, y al encontrarlo, nos debe guiar a la búsqueda de patologías relacionadas, sin descuidar la interconsulta con el endocrinólogo infantil".

Puntos a tener en cuenta en los niños que la padecen

Puede parecer que las zonas de la piel afectadas por la acantosis nigricans están sucias, pero no lo están. Frotar con fuerza la piel no ayudará a aclarar su tono y, además, la puede irritar. Lávate la piel con suavidad, sin usar lejía, decolorantes ni tratamientos exfoliantes de venta sin receta médica.

Llevar una dieta saludable y hacer ejercicio físico con regularidad te puede ayudar a bajar la concentración de insulina en sangre y a mejorar el aspecto de tu piel. Hay que asegurarse de elegir cereales integrales y abundantes frutas y verduras; beber agua o leche descremada en vez de refrescos, jugos u otras bebidas azucaradas; limitar las comidas procesadas, las ricas en grasas y las azucaradas; y es fundamental hacer actividad física todos los días.