El colectivo partió de Las Termas el lunes a las 22. Fue sorprendido martes de madrugada. Dos cómplices camuflados como pasajeros.
Tour de compras con 23 santiagueños es asaltado en Tucumán y despojado de más de $ 10 millones Tour de compras con 23 santiagueños es asaltado en Tucumán y despojado de más de $ 10 millones
Un grupo comando asaltó en Tucumán a un tour de compras con 23 santiagueños que partió desde Las Termas de Río Hondo, rumbo a Salta, a quienes sometió a una pesadilla armada y despojó de más de $ 10 M., más objetos personales, en especial celulares.
El atraco fue perpetrado el martes a la madrugada en la entrada de El Cadillal, sobre Ruta Nacional 9. La hipótesis de los funcionarios es que los santiagueños viajaban a bordo de un micro de larga distancia de la empresa Crucero del Sur, con destino a la ciudad de Aguas Blancas, Salta, en el límite con Bolivia, para realizar un tour de compras.
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Alrededor de las 00:30, llegando a la entrada de El Cadillal, cerca del control policial de Tapia, dos pasajeros que viajaban en el interior del colectivo -actuando de manera conjunta y coordinada- exigieron al chofer del colectivo que detuviera la marcha, aduciendo que un familiar se había accidentado en la ruta.
Persecución
En ese instante, el colectivero advirtió que era perseguido por un automóvil Fiat Siena y le dijo al pasajero, no. Por nada, aclaró, detendría la marcha, ignorando que trasladaba a dos eslabones de esa cadena difusa, pero pesada.
Más "persuasivos", los pasajeros cómplices extrajeron de sus ropas armas de fuego, una tipo revólver. Hicieron múltiples disparos y el chofer no tuvo otra que bajar la velocidad para facilitar el abordaje de tres sujetos más al colectivo, se supo en Tucumán.
Ya doblegados, chofer y pasajeros, los cinco delincuentes golpearon y amenazaron con armas de fuego a todos por igual.
Satisfecha con el botín, la banda bajó del transporte y se trasladó al domicilio de calle Roca Este y Álvarez Condarco, a los fines de hacer la división, pero antes de destino la policía los apresó y aguó el festejo.
Llegaron a sustraer casi $10.000.000, celulares, documentación y elementos personales de los viajeros.
El auxiliar de fiscal, Rogelio Rodríguez del Busto, solicitó ayer medidas de coerción para los cinco imputados, por el término de cuatro meses. Acusó a cuatro por "robo doblemente agravado por ser cometido en despoblado y en banda y con armas de fuego".
De la Guardia Urbana
En tanto, al quinto elemento (integrante de la Guardia Urbana) se acusó de "robo triplemente agravado por ser cometido en despoblado y en banda, por el uso de armas de fuego y por ser cometido por un integrante de la fuerza de seguridad".
Por su parte, la Justicia otorgó parcialmente las medidas. Otorgó tres meses de prisión preventiva y ordenó el inmediato traslado al penal de Villa Urquiza.
Las fuentes adelantaron que habría otros cuatro que lograron escaparse. Es más, se sospecha que ellos alcanzaron a escaparse con el botín, ya que hay cinco presos, pero de los más de $ 10 M. nada pudo saberse.
Por el apuro, solo pudieron robar el 10% del dinero
El único detenido foráneo es el rosarino Mario Nicolás Santoro, aunque se desconoce si está radicado en Tucumán, o arribó solo para el golpe. A los investigadores que trabajan bajo las instrucciones del fiscal Diego Hevia les interesa sobremanera la logística y la información que manejaba la banda.
Una teoría es que los dos cómplices actuaban integrados a los pasajeros que al menos viaja cada 15 días. Las cifras son atractivas para el submundo. Una persona que va a comprar para luego revender lleva entre $ 3 y $ 5 millones. Un micro transporta entre 15 y 30 personas. Ello da un cálculo de entre $69 y $115 millones que llevarían los pasajeros para sus compras, pero el apuro obligó a saquear lo que pudieron para escapar.
En ese mar de conjeturas o usinas, lo único de lo que están seguros los policías tucumanos es que al menos los detenidos locales carecen de antecedentes y/o experiencia en golpes a colectivos.
Ahora, los funcionarios trabajan sobre los prófugos. Las fuentes indicaron que la Justicia tucumana ha solicitado colaboración a policías de otras regiones, en busca de información sobre los prófugos.
Los caídos en desgracia habrían cantado todo, ni bien los policías les cayeron con todo. Pero no es menos cierto que los 23 damnificados aún aguardan el reintegro del botín, algunos de los cuales aún permanecen en Tucumán.
Para más certezas, la Justicia secuestró celulares y los expertos ya trabajan en la extracción de información, quizá el "puente" para arribar a la verdad real y no a la actual a medias, graficó un comisario anoche a esta redacción.