Para la defensa de Campos, su cliente fue víctima de una banda interprovincial. Rigen medidas por 120 días. Operaban con el método "skimming".
Liberan a trío bandeño acusado de estafar con tarjetas clonadas Liberan a trío bandeño acusado de estafar con tarjetas clonadas
La Justicia excarceló ayer a tres jóvenes bandeños, sindicados de integrar una banda interprovincial que habría clonado tarjetas de débito (método "skimming") y perpetrado una defraudación millonaria.
En audiencia, la jueza de Control y Garantías, Roxana Menini, legalizó la aprehensión, pero al mismo tiempo determinó el cese de la misma y fijó reglas de conducta por 120 días: las mismas recayeron en dos cómplices, de 18 años, y un tercero de 17.
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Campos fue asistido por el procurador Fabio Cisneros, la abogada Ana Gutiérrez y Gabriel Chávez. "Nuestro representado fue víctima y usado como instrumento por una organización que se dedica a este tipo de estafas", señaló Cisneros.
El "skimming" representa una modalidad delictiva en la que los criminales obtienen información confidencial de tus tarjetas bancarias con el objetivo de realizar transacciones fraudulentas o clonar tus tarjetas.
Las maniobras
De acuerdo con la fiscal, Natalia Saavedra, los acusados acudían a cajeros automáticos en La Banda y operaban con tarjetas clonadas. Los policías los esperaron en cajeros automáticos en 25 de Mayo y Chacabuco de La Banda y sorprendieron al trío.
En el procedimiento, al de 17 años le incautaron su celular. Orellana Ruibal llevaba un morral negro con 9 tarjetas clonadas (de casas de juegos infantiles) y su celular.
En tanto, a Campos secuestraron un iPhone 15 Pro Max (valuado en $2 millones) y una tarjeta de débito de una billetera virtual. También, les secuestraron una motocicleta Honda CB de 190 cc.
Después, les secuestraron una notebook, una netbook del Programa Conectar Igualdad, celulares, otras 18 tarjetas clonadas, es decir con la inscripción de casas de juegos infantiles, un lector de tarjeta, un pendrive, ropa y dos cigarrillos de marihuana.
Ahora, Menini les dio luz verde a la libertad, pero bien vigilados, o chau a la incipiente resolución.