Crece el temor de un ataque inminente de Irán contra Israel

TEL AVIV, Israel. Cuando Israel atacó el consulado de Irán en Damasco, Siria, y mató a varios miembros de la Guardia Revolucionaria, entre ellos dos generales, desató también el temor a una escalada de niveles inciertos en el conflicto que sobrevuela todo Medio Oriente. El régimen de Teherán dejó claro que respondería y ahora tanto Israel como el conjunto de la comunidad internacional intentan determinar cuándo y cómo lo hará.

Frente a esos temores, ayer se informó que Estados Unidos enviará refuerzos a Medio Oriente, sin precisar de qué se trata. Según reportes, el portaaviones USS Dwight Eisenhower navega en dirección norte a través del Mar Rojo hacia Israel, en una muestra de disuasión contra Irán.

El ataque en Damasco del 1 de abril, cuya autoría nunca reivindicó Israel -no suele hacerlo cuando son acciones en países vecinos-, llevó al líder supremo iraní, el ayatollah Ali Khamenei, a dar por seguro que habría "castigo". Así lo apuntalaron otros líderes, como el presidente iraní, Ebrahim Raisi, y el ministro de Relaciones Exteriores, Hossein Amir Abdolahian, quien intensificó sus contactos con gobiernos tanto de Medio Oriente como de Europa.

El llamado a la "contención" es prácticamente generalizado, pero a estas alturas pocos dudan de que Teherán cumplirá su amenaza y habrá algún tipo de respuesta. La inteligencia de EE.UU. asume que el ataque es inminente -fuentes citadas por el diario The Wall Street Journal advirtieron que puede ser en 24 ó 48 horas- y el presidente Joe Biden dejó claro que, frente a las "amenazas" iraníes, el apoyo a Israel es "férreo".