Tres jóvenes recibirán la admisión al Seminario de la Diócesis local

En el transcurso de una ceremonia que tendrá lugar mañana, a las 19, en la Catedral Basílica, presidida por el obispo diocesano monseñor Vicente Bokalic, recibirán su admisión al Seminario local, tres jóvenes santiagueños, mientras que el seminarista santafesino, pero que servirá en nuestra Diócesis, recibirá el Ministerio de Lector.

Se trata de los jóvenes Ramón Ricardo Silva y Facundo Gonzalo Gallego, de La Banda, y Nicolás Sebastián Arce, de la Capital, quienes recibirán la bendición del obispo para seguir su carrera hacia la ordenación sacerdotal, y Federico Poldi, quien será instituido en el Ministerio de Lector.

"Se trata de una ceremonia sencilla, en la que luego de su homilía, el obispo imparte una bendición a los aspirantes, como símbolo de que los va a acompañar durante su recorrido en el seminario, ya que han demostrado durante el cursado que llevan, un serio compromiso y vocación", explicó el padre Julián Cueva, rector del Seminario "Santiago, el Mayor".

Explicó el religioso que, "el joven que desee ser sacerdote, en primer lugar debe ser admitido ritualmente a las sagradas órdenes del diaconado y presbiteral, que es lo que pasará con estos tres chicos. Esta es una celebración litúrgica de la Iglesia. Esto se hace una vez que se ha hecho un período de cuatro o cinco años en el seminario, en que hay una certeza de su vocación sacerdotal, entonces la Iglesia asume el compromiso de formarlo en ese camino. O sea que estos chicos están dando sus primeros pasos".

El significado de las instituciones que reciben los jóvenes seminaristas

Respecto de la institución que recibirá el joven Poldi, explicó el padre Cueva que "luego de ser admitido en el seminario, viene la institución de dos ministerios, el primero que se le instituye al joven es el del lectorado, para que pueda ejercer la enseñanza de la palabra de Dios, la lectura y todo lo que tenga que ver con la Palabra de Dios".

"Pasado un tiempo, se le instituye en el ministerio del acolitado, que son pasos transitorios hasta el punto final que sería la ordenación presbiteral", amplió.

Comentó que "todas estas instituciones tienen que ver con la eucaristía, poder distribuir la eucaristía, hacer celebraciones, no de misas, sino de adoración eucarísticas, entre otras relacionadas con la eucaristía".

"Después viene la orden del diaconado, que ya puede bendecir, bautizar, casar, leer la palabra de Dios, y luego la institución del presbiterado es lo que lo distingue de los demás, porque puede celebrar la misa y la confesión", finalizó.