Tres policías cayeron presos por cobrar una coima de $25.000 para entregar una moto secuestrada Tres policías cayeron presos por cobrar una coima de $25.000 para entregar una moto secuestrada
Un control de rutina, en la entrega de guardia en el depósito de secuestros de rodados -ubicado en la localidad de La Aguada, departamento Río Hondo- dejó al descubierto que tres policías habían coimeado a un colombiano para entregarle una motocicleta secuestrada.
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Según la investigación que lleva a delante el Dr. Rafael Zanni -fiscal de turno- el hecho fue descubierto el 31 de enero, cuando el cabo primero Jorge Ovejero informó que tras ingresar de guardia al mencionado depósito y al hacer el informe sobre los vehículos secuestrados, notó que faltaba una motocicleta Yamaha FZ.
Dicho rodado, según las averiguaciones, había sido secuestrado el día 30 de enero, cuando personal de la Comisaría 50 irrumpió en una vivienda donde se estaba realizando una fiesta ilegal. El dueño del rodado -un joven de nacionalidad colombiana- para no ser aprehendido por violar el artículo 205, huyó por la parte trasera del inmueble y dejó el rodado abandonado.
Desde entonces, la moto estuvo en calidad de secuestro en la dependencia policial.
Averiguaciones
Con el dato sobre la ausencia del rodado, el cabo informó a sus superiores y explicó además que en el lugar halló un candado de seguridad violentado. Al averiguar quién lo había antecedido en el turno, los investigadores llegaron hasta el agente Juan Pablo Vizcarra -de 26 años, residente en Arenales, departamento Jiménez- quien dijo desconocer lo que había sucedido.
El agente expresó que el último control que había realizado fue la noche anterior a la guardia de Ovejero -cerca de las 23- y que todo se encontraba “sin novedad”. Desde entonces la Justicia inició una investigación pormenorizada.
Según se supo ayer, los uniformados lograron ubicar al dueño de la motocicleta, y constataron que éste tenía en su poder el rodado, aunque su devolución no había sido ordenado por la Justicia, por lo que inmediatamente le secuestraron nuevamente la moto.
Confesión
Allí fue cuando el colombiano contó que el día posterior al de la fiesta ilegal comenzó a ‘averiguar’ dónde estaba su moto. Así llegó hasta un funcionario -en apariencias el agente- quien le habría dejado entrever cómo podía recuperar el rodado.
Para ello le habría dicho que debía hablar a otro policía -de un cargo superior al suyo, supuestamente un oficial subinspector- con quien tenía que ‘arreglar’ la entrega. Efectivamente el colombiano dijo que acordó con este funcionario el pago de $25.000 para “devolverle bajo cuerda” su vehículo.
Según consta en la investigación del Dr. Zanni, el oficial llevó -en su vehículo particular- al colombiano hasta La Aguada, y sin que éste descendiera del rodado, habría hablado con otro oficial, que se encontraba de servicio.
Minutos más tarde, tras una breve ‘conversación’, el oficial retiró el rodado y se la entregó al colombiano, quien regresó a su domicilio en su propio vehículo, previo hacer entrega del dinero exigido.
Con las evidencias en su poder, el Dr. Zanni solicitó al juez una orden de allanamiento y detención para los policías, pero los acusados se presentaron en forma voluntaria en la Departamental N°6. Allí se les informó al agente Vizcarra, al oficial inspector Juan Pablo Aguirre (31) y al oficial Inspector Franco Sosa (32) que quedaban detenidos, y de inmediato les secuestraron el arma reglamentaria.