Definen el futuro de policías, imputados por abusar de menor

La Justicia realizaría esta semana una audiencia decisiva, en cuyo transcurso la defensa requerirá la excarcelación para tres funcionarios policiales, apresados el 7 de enero último sindicados de abusar sexualmente de un menor en el interior de la Seccional 32, en Nueva Esperanza, departamento Pellegrini.

Así lo adelantó el abogado defensor de los tres efectivos, Marcelo Castillo Gioya, dentro de una compleja investigación a cargo de la fiscal Jésica Lucas por presunto “abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la condición de funcionarios públicos y por ser más de dos personas y en perjuicio de un menor”.

El prólogo de la historia fue escrito el 12 de abril de 2020. Esa mañana, los policías se trasladaron a un barrio ante un bochorno con alcohol, amenazas y tiros al aire. Primero llegó un policía y habría surgido cierta resistencia en la familia dueña de casa. Luego, se presentaron más efectivos. En medio de gritos y desórdenes, padre e hijo adolescente fueron conducidos a la Seccional 32.

Dos meses después, 16 de junio, el adulto denunció en la Justicia abuso sexual y amenazas. Casi siete meses después, el 7 de enero, el joven fue escuchado en Cámara Gesell y ratificó la denuncia de su padre. Cayeron presos los tres efectivos y a una mujer policía le fue concedida la eximición de prisión.

Esta semana, la Fiscalía y la defensa irán a audiencia. La primera, procuraría extender sendas detenciones con el dictado de la prisión preventiva.

“La defensa instará a la Justicia al dictado de falta de mérito y, por ende, la excarcelación”, adelantó Castillo Gioya. “Para nuestra defensa, hay casi 15 testigos que nos permitirán desacreditar la hipótesis del abuso sexual”, explicó a EL LIBERAL.

“Mis defendidos llevan detenidos más allá del tiempo previsto por Ley. Este lunes haremos una segunda presentación. En ella, iremos por la excarcelación porque el Ministerio Fiscal no podrá sostener con pruebas tamaña acusación”, subrayó el abogado.

“Tenemos múltiples testimonios que determinarán que durante el operativo, en los fondos de la comisaría, el adolescente no tuvo contacto alguno con los imputados. Por ejemplo, están A.Q., E.S y D.B., considerados testigos vitales. Van desde vecinos del denunciante, hasta una testigo que se encontraba en la comisaría, ya que fue citada como tal en el procedimiento por violación al artículo N° 205 del Código Penal, que delinea normas ante el Covid-19”, acotó Castillo Gioya.

“Nadie señaló haber contemplado vejámenes algunos en perjuicio del menor”, enfatizó el abogado, quien subrayó: “Mis asistidos pueden seguir en el proceso, o no, pero libres. Tenga la certeza de que no entorpecerán la investigación. Son los principales interesados en que la verdad real llegue a la Justicia y a lao sociedad”, sintetizó.

Cronología del proceso con un desenlace imprevisible

12 DE ABRIL: Padre e hijos acaban alojados en la comisaría. Hay disparidad horaria. Se cree que fue entre las 22.30 y las 23.30.

16 DE JUNIO: El menor deslizó que lo tuvieron de rodillas y se turnaban para golpearlo. Dio nombres de policías y hasta ahondó que lo golpearon con un hierro. Incluyó a una mujer policía que se reía y nada hacía para frenarlos.

22 DE JUNIO: El padre del adolescente habría ratificado la denuncia. También, habría agregado que el 27 de mayo varios policías arribaron a su casa e hicieron disparos al aire. También, que el 7 de junio otros efectivos llegaron a la vivienda y sugirieron guardar silencio, o bien la próxima vez le darían a su hijo mucho más que una práctica sexual leve.

7 DE ENERO: El menor fue escuchado en Cámara Gesell. Habría señalado de nuevo que varios policías lo agredieron y lo sometieron a abusos sexuales.