Descubren “narco encomienda” para un interno de Colonia Pinto con marihuana oculta en fideos Descubren “narco encomienda” para un interno de Colonia Pinto con marihuana oculta en fideos
Más de 160 bagullos de marihuana fueron descubiertos en el interior de paquetes de fideos mostacholes que habían llegado a través de una encomienda para un interno del Penal Federal de Colonia Pinto. Los guardias advirtieron las anomalías y la Justicia ordenó que efectivos de la Policía Federal realicen el control correspondiente, y posteriormente el secuestro de la sustancia.
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Ya estaría identificado el destinatario y también el remitente, por lo que no se descartan nuevos procedimientos en las próximas horas.
De acuerdo con lo manifestado por fuentes policiales y judiciales, ayer llegó una encomienda con alimentos para uno de los internos de la Unidad Penitenciaria Federal N° 35 Colonia Pinto.
Las encomiendas son una modalidad habitual, ya que el Penal alberga a internos de diferentes provincias y las familias les envían víveres de forma recurrente.
Como se hace en todos los casos, procedieron a controlar todo lo que tenía la encomienda. Así advirtieron que algunas bolsas de fideos estaban adulteradas en su empaquetado y su peso era diferente.
Ante la sospecha de que podían contener algún tipo de sustancia, informaron de la situación al juez federal Dr. Guillermo Molinari. El magistrado ordenó que efectivos de la Delegación Santiago del Estero de la Policía Federal se hagan presentes en la Unidad Penitenciaria y procedan a la requisa de los mostacholes.
El trabajo de los uniformados confirmó las sospechas. Habían acondicionado 166 bagullos de marihuana que estaban ocultos entre los fideos, tratando de burlar los controles de los efectivos.
La prueba de campo arrojó que se trataba en total de 190 gramos de cannabis sativa, los cuales fueron incautados y trasladados a la dependencia de la Policía Federal en calidad de secuestros.
Investigación
A partir del hallazgo, los funcionarios policiales requisaron todo el contenido de la encomienda para establecer si había una maniobra similar en el resto de los alimentos, lo cual fue descartado.
Por otra parte, el juez federal dispuso que se inicien las averiguaciones correspondientes para establecer desde dónde provenía la encomienda y quién el interno destinatario.
Las fuentes ligadas al caso deslizaron que ambos ya estarían identificados, por lo que no se descartaba que se puedan ordenar nuevos procedimientos en las próximas horas.
Los investigadores sospechan que el interno que debía recibir la “narco encomienda”, iba a intentar comercializar la sustancia dentro de los muros de la cárcel y que claramente tendría nexos con alguna organización dedicada a la venta de drogas en otra provincia.
Las autoridades ya adelantaron que se profundizarán las averiguaciones para determinar los vínculos del interno, así como también para verificar en los registros cuándo fueron las últimas veces que recibió encomiendas a su nombre y si habían partido del mismo lugar.
Presumen que una banda está detrás de la sustancia hallada
El volumen de la sustancia secuestrada abre una serie de interrogantes sobre lo que sucede puertas adentro de la Unidad Penitenciaria.
Los investigadores sospechan que podrían seguir operando entre los pabellones alguna célula de bandas dedicadas a la venta de drogas, porque más de 160 bagullos de marihuana no son para el consumo personal de algún interno.
Las autoridades carcelarias, la Policía Federal y la Justici , aunarán esfuerzos para develar cómo es el mecanismo de los cabecillas de la organización, que ahora quedó al descubierto con este procedimiento.
