Antes del cierre de la circulación, los santiagueños se abastecieron en el centro
Ayer desde la mañana se implementaron controles en las calles a cargo de personal policial, que tomaba la temperatura corporal a los vecinos.
Una vez conocidos los alcances del Decreto de Necesidad y Urgencia del gobierno nacional, al que se adhirió luego nuestra provincia, los santiagueños tomaron sus previsiones y se volcaron al centro de la ciudad, para aprovechar los precios de los supermercados y de otros comercios de productos escenciales, dado que desde hoy sólo se puede concurrir a los negocios de proximidad.
Desde la mañana, se vieron largas colas en los comercios céntricos, especialmente aquellos de productos alimenticios.
“Venimos a aprovechar los precios, porque en el barrio siempre cuesta un poco más, y no tenemos ninguno que esté bien surtido cerca de nuestra casa”, comentó Elvia a EL LIBERAL, quien se gana la vida vendiendo empanadas en uno de los barrios de la ciudad.
Otro de los comercios que tuvieron gran movimiento fueron los del rubro repostería, ya que frente a la inactividad que durará hasta fin de mes en un principio, mucha gente se dedica a la venta productos dulces desde su casa.
Controles
El movimiento vehicular por el centro se tornó caótico por momentos, y aquellos que llegaron desde los barrios al centro pasadas las 17, debieron estacionar lejos de las cuatro avenidas o bien pagar una cochera en la zona más cercana a los comercios.
Mientras tanto, personal policial instalado en los retenes ubicados en las avenidas principales de la zona céntrica, paraban los vehículos y tomaban la temperatura corporal a los ocupantes, lo cual originó algunos embotellamientos, especialmente por avenida Belgrano.