“Lo importante no es alarmarnos porque hay muchas enfermedades que son estacionales y muy comunes”
Piden no descuidar las medidas de prevención.
El médico pediatra, Dr. Manuel Barthe, director de región NOA de la Sociedad Argentina de Pediatría, pide a los padres y a los docentes, “no generar alarma” frente a cuadros que son comunes de esta época del año, como los resfríos estacionales, “que no necesariamente” son síntomas de Covid.
“Respecto de este tema de cuándo se debe cerrar una burbuja, nos debe servir la experiencia que tienen en la provincia de Buenos Aires, que iniciaron la presencialidad en febrero, y que en 45 mil burbujas hubo solo poco más de 400 casos sospechosos, lo cual refleja que están preparados en las escuelas, y las familias deben tomar conciencia de cómo funciona una burbuja y llevarlo a la vida social que puedan tener”, analizó Barthe.
Tras considerar que “también este puede ser un año muy difícil”, pidió que la situación no acarree “cansancio, sino acostumbramiento a vivir esta nueva realidad, a cuidarnos y a darnos los placeres que podamos y privarnos de otros”.
“Lo importante de esta conducta, es que sepamos mantenerla en cada lugar al que vayamos, para no llevar el virus a la burbuja”, dijo el médico, en consonancia con la posición expresada por la Sociedad Argentina de Pediatría, que pidió “coherencia” a los padres, al ejemplificar que sería oportuno, por ejemplo, “invitar a un cumpleaños a los mismos chicos con los que se comparte la burbuja”.
“El llamado es estar concientizados, porque la escuela es algo positivo para los chicos, es muy positivo el encuentro con sus pares, la socialización, y hay que ver la mejor manera de poder manejarnos para que sea lo menos traumático para los chicos; que puedan transitar la presencialidad con cuidado, algo que debe aprender la familia y los adultos.
El doctor Barthe reveló que según datos de la Sociedad Argentina de Pediatría, los niños presentan actualmente una baja incidencia de casos: 2% de los casos diagnosticados en China, 1,2% en Italia y menos del 5% en Estados Unidos, y que el 43% de los niños fueron infecciones por exposición en el núcleo familiar.
Y sobre cómo se define hoy caso sospechoso pediátrico, enumeró que se incluye a quien presente fiebre de 37.5 o más, y uno o más síntomas respiratorios como tos, odinofagia, dificultad respiratoria o anosmia/disgeusia.