Mataron de un tiro en la cabeza a un abogado y militante de La Cámpora
Sucedió en Villa Elisa, provincia de Buenos Aires. La víctima fue identificada como Eduardo Héctor Chantada (52). Se encontraba de visita junto a su familia en la casa de un amigo.
Eduardo Héctor Chantada, con domicilio porteño, asesor y empleado de la Biblioteca del Congreso de la Nación desde 2007 según sus registros comerciales, que hasta sus últimos fue cercano a La Cámpora, fue asesinado de un disparo en la nuca en lo que se sospecha que fue un intento de robo.
El hecho ocurrió ayer cuando Chantada, de 55 años, y parte de su familia habían llegado a la casa de un amigo, ubicada en las calles 28 y 409, Villa Elisa, para pasar la tarde.
Fuentes cercanas a la investigación encabezada por la UFI N°16 del fiscal Juan Condomí Alcorta indicaron que el hecho ocurrió luego de que el portón de la casa quedara abierto: dos atacantes ingresaron al domicilio en una moto.
Según fuentes cercanas a la investigación, uno se bajó del vehículo, ya en el interior de la casa, y al cruzarse con Chantada efectuó dos disparos con un arma.
Uno de los proyectiles impactó en la cabeza del abogado, a la altura de la nuca. Luego, el homicida se subió en la moto y ambos delincuentes escaparon de inmediato.
Chantada, que en su momento se encontraba consciente, fue trasladado al hospital San Roque de Gonnet, donde perdió la vida a las pocas horas de llegar.
De inmediato, las sospechas crecieron dados los vínculos políticos de Chantada: voces en el entramado del Gobierno llamaron a los tribunales de La Plata para interiorizarse del tema.
Sin embargo, a prima facie, la Justicia descree de un ataque sicario. No hubo testigos del hecho que lo presenciaran con sus ojos cómo Chantada fue asesinado, sin embargo, uno de los presentes en el jardín de la casa aseguró que oyó cómo los atacantes aseguraban que esto “era un robo”. Que se haya escapado un disparo es una posibilidad.
“Podrían haberlo asesinado en muchas otras circunstancias esa tarde, mientras salía de la casa esa tarde. Un sicario no mata así. A primera vista, estos tipos eran dos motochorros, parece gente muy desbolada. No da el perfil de un asesinato profesional”, asegura una fuente clave en el expediente a este medio.
Chantada había desarrollado la mayor parte de su carrera vinculado al negocio de las autopartes. Durante años trabajó como asesor oficial del Grupo PROA, que nuclea a empresas autopartistas del país, y, según el medio 0221, durante la década del ’90 integró las filas del FREPASO.
Fiel a su pasado en la Juventud Peronista, durante los últimos años había ejercido además una militancia activa dentro de la agrupación La Cámpora, donde era conocido bajo el apodo de “Pulpo”.