“Este año ponemos el sufrimiento a los pies del Niño Jesús”
Una tradición de la Iglesia Católica que este año cobrará un significado especial por la pandemia.
Según la tradición de la Iglesia Católica, ayer día de la Inmaculada Concepción de María, es la jornada en la que se arman el pesebre y el árbol de Navidad, que sin dudas este año cobrarán mayor significación para las personas muy apegadas a estos símbolos de la Navidad.
Verónica Herrera es la encargada junto a Liliana Miana de llevar adelante todos los años el taller pesebrista en la parroquia San Francisco y este año, dada la situación epidemiológica, no se realizó y dijo que desea poner “a los pies del Niño Jesús el sufrimiento de la gente de todo el mundo, que ha perdido muchas cosas valiosas de su vida”.
“El significado del pesebre tiene un sentido litúrgico y también mucho de tradición. Con el pesebre representamos el nacimiento de Jesús, y lo que siempre buscamos en los talleres es que no nos olvidemos que la Navidad es el cumpleaños de Jesús, y que debemos festejar con él, buscando acercarnos a Dios, a Cristo, a la Iglesia”, explicó Verónica.
Admitió que para muchas personas estas celebraciones religiosas tendrán un significado especial, dadas las circunstancias que le toca vivir a la humanidad a raíz del coronavirus.
Según la tradición, el pesebre se remonta a los primeros siglos cristianos, si bien quien lo popularizó fue San Francisco de Asís, en el siglo XIII. Tanto éste como el árbol de Navidad, deben desarmarse el 6 de enero, Día de los Reyes Magos.